- Windows 11 integra widgets y controles de Spotify para manejar música sin abrir la app completa, ya sea desde el panel de widgets o la Xbox Game Bar.
- El Miniplayer de Spotify para escritorio ofrece un reproductor flotante adaptable, con controles completos y modos de tamaño mínimo para no interrumpir el trabajo.
- Widgets como el de Phone Link complementan a Spotify integrando el móvil y las notificaciones en el escritorio, creando un centro de control cómodo.
Si usas Spotify casi a diario y tienes un PC con Windows 11, seguramente te has planteado alguna vez cómo controlar la música sin estar abriendo y cerrando la app todo el rato. Entre los nuevos widgets del sistema, la Barra de juegos y el Miniplayer oficial, la experiencia ha mejorado muchísimo y ya no hace falta ir saltando de ventana en ventana para cambiar de canción o pausar una lista.
La idea de Microsoft y Spotify es que puedas manejar tu música de forma rápida, cómoda y con el mínimo estorbo posible, ya sea desde el panel de widgets de Windows 11, con la Xbox Game Bar o usando el Miniplayer flotante. Todo esto se integra bastante bien con el resto de herramientas del sistema, de manera que puedas seguir trabajando, jugando o navegando sin perder el control de lo que está sonando.
Qué es el widget de Spotify en Windows 11 y por qué interesa
En Windows 11 los widgets han pasado de ser una curiosidad a convertirse en una forma muy ágil de acceder a información y controles básicos sin abandonar lo que estás haciendo. Entre el tiempo, noticias o tareas, uno de los más útiles es el que permite gestionar la reproducción de Spotify desde el propio sistema.
En el caso concreto de Spotify, Microsoft y la propia plataforma de streaming han trabajado para integrar controles y accesos directos a tus contenidos directamente en Windows 11. La idea es acercarse a lo que ya hacemos en el móvil con los widgets, pero adaptado al escritorio, donde el espacio y el flujo de trabajo son diferentes.
Los primeros pasos de esta integración llegaron a través de compilaciones de prueba de Windows 11 (como la build 25290 para el canal de desarrolladores), donde se empezó a ver un widget dedicado a Spotify junto a otros como el de Phone Link. Desde entonces, la experiencia ha ido puliéndose, especialmente apoyándose en dos vías: el panel de widgets clásico de Windows 11 y la Xbox Game Bar.
Además, hay que sumar el Miniplayer oficial de Spotify para escritorio, que funciona como una ventana flotante siempre disponible sobre el resto de aplicaciones. Este componente no es un widget de Windows como tal, pero cumple una función muy parecida: control rápido, mínimo tamaño y sin interrumpir lo que estás haciendo.
Gracias a la combinación de estas opciones, es posible tener una experiencia bastante completa: acceso a listas, control de reproducción, manejo de podcasts y vista de carátulas, sin necesidad de dejar a un lado tu juego, tu editor de texto o el navegador.
Cómo funciona el widget de Spotify en el ecosistema de Windows 11
La filosofía de los widgets en Windows 11 es permitir que el usuario consulte o maneje cierta información de forma rápida, fluida y sin abandonar la aplicación principal que tiene en pantalla. En el caso de Spotify, esto se traduce en tener accesibles tus listas, carátulas y controles de reproducción a solo un gesto o atajo de teclado.
En las primeras implementaciones centradas en el panel de widgets, el componente de Spotify ofrecía principalmente acceso directo a las listas de reproducción de tu cuenta. Desde ahí, podías iniciar la reproducción de cualquiera de ellas con un simple clic en el icono o la carátula asociada, sin necesidad de abrir la ventana principal de Spotify.
Una vez iniciada la reproducción desde el widget, era posible realizar acciones básicas como pausar, reanudar o pasar a la siguiente canción. El objetivo es que para las operaciones del día a día no tengas que entrar en la app completa, reduciendo el consumo de recursos y evitando que la ventana de Spotify esté continuamente en primer plano.
Otra ventaja clara de este enfoque es que, al no depender de la interfaz completa de Spotify, el widget se puede mostrar de forma ligera y discreta, ocupando muy poco espacio en pantalla. Esto es especialmente útil en portátiles o equipos con monitores más pequeños, donde cada centímetro cuenta a la hora de organizar ventanas.
Por el lado de la experiencia de usuario, este tipo de widget se integra con el gesto típico de Windows 11 para abrir el panel de widgets, de modo que con un clic en la zona inferior izquierda de la barra de tareas (o usando el gesto táctil correspondiente) puedes desplegar todos los widgets activos y controlar la música al vuelo.
En los canales de prueba de Windows, Microsoft anunció que tanto el widget de Spotify como el de Phone Link formaban parte de esa misma oleada de novedades. Phone Link se encarga de todo lo que tiene que ver con el móvil (llamadas, notificaciones, mensajes), mientras que Spotify se centra en la reproducción multimedia. Ambos se pueden colocar en el mismo panel y convivir con otros widgets informativos.
Con el tiempo, la integración de Spotify en el ecosistema de Windows 11 ha incorporado también la Barra de juegos (Xbox Game Bar) y el Miniplayer, ampliando las posibilidades de control según el contexto de uso: trabajo, ocio, juegos o multitarea intensa.
Controlar Spotify desde la Xbox Game Bar en Windows 11
Uno de los métodos más prácticos para manejar Spotify en Windows 11 es usar la Xbox Game Bar, la superposición que aparece con la combinación de teclas Win+G. Aunque está pensada originalmente para juegos, muchos usuarios la aprovechan como centro rápido de widgets multimedia.
Para que el widget de Spotify dentro de la Game Bar funcione correctamente, es fundamental que la aplicación de Spotify esté abierta y ejecutándose en segundo plano. El widget no reproduce música por sí solo: actúa como un panel de control conectado a la app principal.
El proceso de uso básico es bastante directo: al pulsar Win+G se activa la Barra de juegos, y desde ahí puedes seleccionar y mostrar el widget de Spotify. La primera vez que lo hagas, es posible que te pida iniciar sesión o autorizar el acceso a tu cuenta, de forma que pueda leer lo que se está reproduciendo y manejar la reproducción.
Una vez autenticado, el widget de Spotify en la Game Bar te muestra la información de la pista actual, carátula, botones de reproducción, pausa, siguiente y anterior. Dependiendo de las versiones, también puede mostrar el progreso de la canción y permitirte adelantar o retroceder dentro del tema.
Además, puedes optar por anclar el widget para que permanezca siempre visible (si tu configuración de Game Bar y superposición lo permite). Esto es muy útil cuando estás jugando o trabajando en pantalla completa y quieres tener un pequeño panel flotante siempre a mano.
Después de configurar el widget por primera vez, el uso diario es tan sencillo como pulsar de nuevo Win+G para invocar la Barra de juegos cada vez que necesites controlar la música. No tienes que andar buscando la ventana de Spotify ni cambiar de escritorio virtual.
Esta forma de integración es especialmente apreciada por quienes pasan mucho tiempo en juegos o aplicaciones a pantalla completa, ya que la Game Bar se superpone sin cerrar ni minimizar lo que hay debajo. De este modo, cambiar de canción o ajustar la reproducción no rompe la inmersión ni te saca del flujo de trabajo.
Así es el Miniplayer de Spotify: un “widget” flotante para escritorio
Junto al soporte de widgets de Windows 11, Spotify ha lanzado su propio Miniplayer para la aplicación de escritorio, una pequeña ventana flotante que funciona casi como un widget independiente, pero gestionado directamente por la app de Spotify.
El Miniplayer surge de una necesidad muy común: muchos usuarios tienen Spotify siempre abierto en segundo plano mientras trabajan o estudian y están continuamente cambiando de canción, ajustando el volumen o modificando opciones como el modo de repetición. Hacer esto implica cambiar de ventana una y otra vez, lo cual rompe bastante el ritmo.
Con el Miniplayer se busca que esos controles básicos estén siempre disponibles en un formato compacto y poco invasivo. El reproductor flotante puede situarse encima de cualquier otra aplicación, permitiendo pausar, avanzar, retroceder y gestionar la cola de reproducción sin tener que abrir el cliente completo.
Una de las características más interesantes es que el Miniplayer no sustituye a la ventana principal de Spotify: ambos conviven. Puedes abrir o cerrar el Miniplayer sin interrumpir para nada lo que estás escuchando, y volver a la ventana completa cuando quieras explorar nuevas listas, buscar artistas o revisar recomendaciones.
En el caso de los podcasts en vídeo, el Miniplayer ofrece una experiencia de tipo picture-in-picture, mostrando el vídeo en una ventana flotante con controles integrados. Esto permite seguir viendo el contenido mientras realizas otras tareas en el PC, ajustando el tamaño de la ventana según necesites.
A nivel de interacción, el Miniplayer también permite gestionar funciones habituales como activar el modo aleatorio, repetir una canción, añadir o quitar temas de tu biblioteca con un solo clic. Esto reduce el riesgo de acabar navegando por playlists y perdiendo el foco, algo que puede ocurrir fácilmente cuando abres la app completa y te dejas llevar por las recomendaciones.
Además, el Miniplayer incluye accesos directos eficientes: al hacer clic en el nombre del artista, el título de la canción o la carátula del álbum, se abre directamente ese contenido en la ventana principal de Spotify. De esta manera saltas al contexto completo solo cuando realmente lo necesitas.
Hay que tener en cuenta un detalle importante: el Miniplayer está disponible únicamente para usuarios Premium en el momento en que se describió la función. Por tanto, si tienes una cuenta gratuita, podrás seguir usando la app de escritorio y posibles widgets del sistema, pero no tendrás acceso a este reproductor flotante nativo.
Diseño adaptable y modos de visualización del Miniplayer
Uno de los puntos fuertes del Miniplayer de Spotify es su diseño adaptable, pensado para no molestar y ajustarse al espacio disponible en pantalla. No se limita a una única forma: puede adoptar diferentes tamaños y proporciones según lo que resulte más cómodo en cada momento.
El Miniplayer puede funcionar en formato cuadrado, rectangular o en una barra alargada muy delada. Esto permite, por ejemplo, tenerlo como un pequeño recuadro en una esquina si quieres ver bien la carátula y la información de la pista, o como una “píldora” mínima cuando solo buscas tener los botones de control básicos.
Muchos usuarios terminan prefiriendo el modo de “pill” o píldora, en tamaño muy reducido, que deja a la vista el título de la canción y los controles esenciales, ocupando el mínimo espacio visual posible. Este formato encaja muy bien si sueles trabajar con varias ventanas abiertas y no quieres que nada tape tu contenido principal.
Otra ventaja es que el Miniplayer permite cambiar de tamaño de forma dinámica, arrastrando desde los bordes como una ventana más de Windows. Puedes agrandarlo cuando te interesa ver mejor la información o el vídeo de un podcast, y volver a encogerlo cuando quieras que pase casi desapercibido.
En muchos flujos de trabajo, el Miniplayer termina colocado en alguna esquina inferior de la pantalla, donde no interfiere con menús, barras de herramientas ni cuadros de diálogo. De este modo, tienes siempre un guiño visual de qué está sonando y acceso instantáneo para pausar o saltar de pista sin buscar nada.
Desde el punto de vista de experiencia de usuario, este diseño adaptable convierte al Miniplayer en una especie de widget transversal que acompaña al usuario por todo el sistema, independientemente de si está navegando, editando documentos, programando o jugando en ventana.
Redactor apasionado del mundo de los bytes y la tecnología en general. Me encanta compartir mis conocimientos a través de la escritura, y eso es lo que haré en este blog, mostrarte todo lo más interesante sobre gadgets, software, hardware, tendencias tecnológicas, y más. Mi objetivo es ayudarte a navegar por el mundo digital de forma sencilla y entretenida.