Todos los easter eggs de Los Simpsons en Fortnite: mapa, secretos y guiños

Última actualización: 06/11/2025
Autor: Isaac
  • Springfield cobra vida con ubicaciones icónicas, misiones ocultas y referencias directas a episodios míticos.
  • La central nuclear activa eventos y puzles con PE y botín, mientras la Mansión Burns oculta trampillas y salas secretas.
  • La Mazmorra del Androide, el Bar de Moe y la Plaza mayor concentran easter eggs clave y recompensas.

Easter eggs de Los Simpsons en Fortnite

Hay colaboraciones que marcan época, y la llegada de Springfield a Fortnite es una de ellas: la mítica ciudad de la familia amarilla se ha materializado como una isla jugable con un nivel de detalle que roza lo obsesivo. En este mapa no solo te vistes de Homer, Marge o Flanders, sino que te cuelas en su salón para sentarte de verdad en el histórico sofá mientras todo el pueblo se viene abajo alrededor. Y eso es solo el comienzo: la isla guarda guiños, bromas internas y referencias por todas partes, preparados para que los fans más cafeteros se den un festín.

La colaboración no se queda en la estética. Epic ha replicado la cabecera de la serie en el tráiler, ha escondido piezas diminutas que remiten a episodios concretos y ha articulado misiones secretas ligadas a esos detalles. El resultado es un «museo interactivo» dentro del battle royale con capacidad para 80 jugadores por partida, un pase de Springfield independiente con recompensas prémium (como los trajes de Homer, Marge y Flanders) y hasta un primer compañero canino muy particular: Bananino. Además, se anunció que cada lunes de noviembre se estrenarían cortos animados originales dentro de Fortnite, reforzando esa sensación de evento cultural total.

Springfield toma la isla: una recreación total

La minitemporada dedicada a la serie ha supuesto un rediseño completo del mapa para que Springfield cobre vida a escala Fortnite. Calles, barrios y puntos de interés icónicos encajan con la jugabilidad sin perder su identidad televisiva. La fidelidad con la que se han trasladado los escenarios más queridos es abrumadora, desde Evergreen Terrace hasta la planta nuclear, pasando por la Plaza mayor, el Bar de Moe o la tienda de cómics.

Mapa de Springfield en Fortnite

El tráiler de anuncio recrea la entradilla de la serie con un mimo tremendo, abriendo boca para la avalancha de easter eggs que espera en cada esquina. De hecho, hay guiños minúsculos pensados para los fans que se saben los capítulos de memoria, y que al encontrarlos desbloquean misiones, PE o recompensas especiales.

Más allá de lo bonito que se ve, todo respira humor Simpson: los chistes visuales, la mala leche de algunos carteles y la sátira que impregna Springfield sobreviven en esta reinterpretación jugable. Fortnite se convierte aquí en un parque temático y, a ratos, en una carta de amor a tres décadas de televisión.

Plaza mayor y los imprescindibles del centro

En la Plaza mayor destaca la estatua de Jeremías Springfield, el fundador del pueblo. Si te da por apretarle el gatillo, la cabeza se precipita al suelo y puedes ponértela de casco. Ese «trofeo» te salva del primer disparo a la cabeza, una genialidad que convierte un gag clásico en mecánica útil.

Muy cerca, el Bar de Moe es parada obligatoria. El local conserva recuerdos para llorar de risa: la máquina del amor, fotos del equipo de softball y de bolos, y un rincón con la urna que guarda las cenizas de Larry, el parroquiano de fondo que murió en su taburete. Si descuelgas el teléfono del bar, la tradición manda: escucharás las travesuras telefónicas de Bart, otro guiño que te saca una sonrisa de inmediato.

  Trucos para Final Fantasy XIV: guía esencial para empezar y ganar gil

A unos pasos, el Badulaque sorprende con dos máquinas recreativas: Bonestorm II, secuela del juego que Bart tuvo entre manos en la serie, y Halfmonth, la parodia de Fortnite que apareció en la temporada 31. También verás carteles que parecen escritos por Apu («nada de devoluciones en la leche…») y estanterías repletas de referencias para el que quiera mirar con calma.

Explorando el distrito comercial, la Sorbetería de Springfield es un homenaje transparente a la fábrica Duff. Encontrarás los tres «sabores» emblemáticos: normal, ligera y zero, reimaginados al estilo Slurp. Son el tipo de detalle que hace que esta isla funcione tanto para fans como para quien solo busca botín.

En el área de Neumáticos en Llamas, si cavas junto a la entrada, desentierras la caja de Mr. Chispa, aquel inolvidable detergente con la cara de Homer. Completar ese hallazgo también suma PE, otra recompensa por dedicarte a husmear.

La Mazmorra del Androide: el santuario friki

La tienda de cómics, la famosa Mazmorra del Androide, es probablemente el lugar con más densidad de referencias por metro cuadrado. Verás cómics como Normalman o Radioactivoman, además de parodias obvias de Marvel al estilo Springfield: The Thung o El increíble Mulk, entre otros. Hasta hay posavasos que remiten a esa versión «Cosmic Wars» de Star Wars, y el bláster de Han luce en el mostrador como si nada.

En una de las vitrinas aparece Krusty en carbonita, un chiste visual que revienta la cuarta pared y alude de manera directa al congelado de Han Solo. La lista de vetados a la entrada incluye nada menos que a Matt Groening, un guiño meta para nota. Y si te fijas, también asoman figuras de Poochie y peluches de Rasca y Pica, los «dibujos dentro de los dibujos» que tantas veces han dado juego.

Este local recompensa la mirada curiosa. Muchas piezas que adornan las estanterías han salido en capítulos concretos y, si eres de pausar para fijarte, te llevarás varias sorpresas. El tono burlón del dependiente se respira en cada etiqueta y cartel, aunque aquí quien pontifica eres tú, padawan de la cultura pop.

Evergreen Terrace: la casa y sus pequeños tesoros

La casa de los Simpson, en Evergreen Terrace, reproduce sus estancias con cariño de fan. En la cocina cuelgan las cortinas con mazorcas de maíz, y en el salón todavía se ven las pisadas de Spider Cerdo en el techo, homenaje a la película que nadie olvida. Sí, te puedes sentar en el sofá y recrear ese momento tan nuestro: Fortnite lo ha clavado.

Abre la nevera y te espera un detalle muy fino: el calendario marca el 17 de diciembre de 1989, el día del primer episodio «oficial». Fecha clave en la historia de la televisión y, ahora, también un guiño canónico en la isla. Estas cositas definen el espíritu de la colaboración.

En el cuarto de Bart hay un muñeco de Radioactivoman, su superhéroe favorito, mientras que en la habitación de Maggie abundan los peluches de Rasca y Pica. Objetos que reaparecen también en la tienda de cómics, atando cabos entre ubicaciones como si de una misión narrativa se tratase.

Y si te vas al «cementerio» de neumáticos, entre cachivaches verás la caja del detergente donde la cara de Homer era la marca. La isla juega constantemente con la memoria de episodios antiguos, hilando referencias sin que te des cuenta.

Saltos, travesuras y retos: del desfiladero al campamento

Uno de los gags más dolorosos de las primeras temporadas fue el salto de Homer sobre la Garganta de Springfield en monopatín. Aquí la rampa está lista para repetir la hazaña, y hasta hay una misión inicial que te anima a intentarlo para ganar PE. La furgoneta de reinicio de la zona está estampada contra un árbol, un guiño a la ambulancia que acabó de rematar a Homer en aquella escena mítica.

  ¿Cómo Cambiar Mi Contraseña En Riot Games?

Si te marchas al Campamento Krusty, puedes rebautizar la bandera central como Campamento Bart, y sí, eso también te deja experiencia. Cerca del lago, una caña de pescar te permitirá capturar al pez de tres ojos, otra de esas bromas recurrentes que han envejecido como el buen vino.

No te vayas sin pasar por las Krusty Burgers: hay bandejas repartidas por el mapa y, si te comes una, cierras otra misión. Los grafitis de «Barto» se pueden crear en varios muros y, al hacerlo, desbloqueas objetivos ocultos adicionales.

En la sala recreativa, cada mueble referencia videojuegos ficticios que ya vimos en la serie, desde Bonestorm hasta Dash Dingo, inspirado descaradamente en Crash Bandicoot. La nostalgia y la risa entran juntas por la puerta.

La central nuclear: cuenta atrás, botones y PE

Conforme avanza la partida, a partir del tercer ciclo de tormenta puede activarse un evento en la central nuclear: la temida fusión del núcleo. Para evitarla, hay que colarse en la sala de control donde trabaja Homer y pulsar los botones Pito, Gorgorito y Bonito en el orden correcto. La pista está en los pósteres de seguridad de las paredes, que asocian símbolos a cada botón y te chivan la combinación en esa partida.

Si te equivocas o pasas del tema, no salta una explosión catastrófica; lo que ocurre es que pierdes una buena oportunidad de sumar PE y se rompe una rejilla decorativa en el centro de la sala de los reactores. Si lo resuelves como toca, además de la experiencia puedes obtener botín especial que sabe a gloria en el tramo final.

Señor Burns: trampillas, mansiones y la cuerda de Smithers

El despacho del Señor Burns en la central esconde, cómo no, una trampilla. Accionarla te manda a una habitación cerrada de la que solo sales derribando paredes, una versión «apta para Fortnite» del clásico truco malvado. En su mansión hay pasadizos, muros falsos, cajas fuertes y palancas que abren paneles, además de una cuerda junto a la cama para llamar a Smithers como si fuese un mayordomo de guardia.

Y en su escritorio hay un botón que en la serie suele «soltar a los perros». Aquí no vas a soltar mascotas reales, pero al pulsarlo aparecen dos sabuesos robóticos que te escoltan durante la partida, al tiempo que completas uno de los objetivos de inicio. Es la traducción perfecta del chiste a mecánica de juego.

Del Bar de Moe a la tienda de cómics: guiños que cuentan historias

Volviendo al Bar de Moe, no es casual que la urna de Larry esté allí: en la temporada 35, Homer y compañía vivieron un periplo para esparcir las cenizas del parroquiano, descubriendo de paso un secreto resplandeciente. Ese arco se homenajea con el rincón de recuerdos del local, donde también cuelga una foto de los Solfamidas, otro capricho para seguidores de fondo de catálogo.

En la Mazmorra del Androide, además de la avalancha de cómics y figuras, hay una pared con fotografías de clientes que tienen prohibida la entrada. Ahí se cuela el nombre de Matt Groening, el padre de la criatura, en una broma interna de las gordas. El bláster de Han y otros guiños a Star Wars reimaginada como Cosmic Wars terminan de redondear un templo friki de primer orden.

  Cómo habilitar DirectStorage en Windows 11 para cargas ultrarrápidas: guía completa

Misiones ocultas y recompensas que merecen la vuelta

Si te acercas a la figura del Señor de las Rosquillas y la destruyes, la rosquilla gigante cae al suelo. Puedes empujarla para romper objetos hasta que se deshace, y al hacerlo completas una misión secreta con recompensa. Es ese tipo de ocurrencia lo que hace que cada ruta por Springfield cambie un poco.

Los rastrillos de Bob Patiño están camuflados por el mapa y, al pisarlos, se desencadena la animación del golpe en toda la cara. Otro objetivo oculto que, además de la risa, te da PE. A veces, la isla te premia por ser un patoso con historia.

Derrotar a cualquier jefe tiene premio colateral: aparece Nelson por unos segundos para soltarte su clásico «Ha-ha!» y se esfuma. El cameo dura lo justo para que se te escape una carcajada, la clase de guiño que convierte una baja épica en una escena de episodio.

Por si faltaba ayuda para identificarlo todo, el canal PlayStationGrenade ha recopilado nada menos que 69 easter eggs en vídeo, todos explicados y conectados con sus momentos originales en la serie. La comunidad se ha volcado y ha cartografiado hasta el último secreto, facilitando que vayas directo a por lo que te falta sin perder el factor sorpresa.

Más allá del mapa: pase, recompensas y disponibilidad

Esta minitemporada funciona con su propio pase de Springfield, independiente del estándar. Al jugar, completar misiones de historia y descubrir secretos, avanzas para desbloquear skins como las de Homer, Marge o Flanders, además de cosméticos y el acompañante Bananino, el primer compañero oficial dentro de Fortnite. Un paquete de progresión que motiva a rebuscar cada esquina.

La experiencia se disfruta en todas las plataformas donde puede jugarse Fortnite. Además, durante el mes de noviembre van apareciendo cortos animados de Los Simpson dentro del juego, reforzando la sensación de que no estamos ante un cruce cualquiera, sino ante un pequeño evento transmedia. Eso sí, el mapa de Springfield tiene fecha de caducidad y solo estará disponible hasta final de mes, así que toca darse prisa si quieres verlo todo.

Lo que propone Epic con Springfield es puro fanservice bien entendido: una ciudad viva que respira humor y referencias, que convierte recuerdos televisivos en mecánicas y premios, y que funciona tanto si vas a por victoria magistral como si prefieres pasearte y reconocer escenarios. Desde la cabeza de Jeremías como casco hasta la fusión del núcleo, pasando por la trampilla de Burns, las bromas telefónicas de Bart o los peluches de Maggie, todo suma para que la isla sea un homenaje jugable a la serie. Si querías excusa para volver a Fortnite o para verlo con otros ojos, aquí la tienes: Springfield te espera con los brazos abiertos y un millón de chistes escondidos.

fortnite simpsons
Artículo relacionado:
Fortnite x Los Simpson: mapa, skins, fechas y todo lo que debes saber