- Resizable BAR permite a la CPU acceder a toda la VRAM y su impacto depende del juego.
- Compatibilidad oficial en plataformas recientes; en antiguas hay mods como ReBarUEFI.
- NVStrapsReBar habilita ReBAR en RTX 20 y GTX 16, pero exige flashear UEFI.
- Activar Above 4G Decoding y valorar riesgos de modificar la BIOS es esencial.
Si llevas un tiempo leyendo sobre rendimiento en juegos, seguro que te suena Resizable BAR o SAM. En pocas palabras, es la opción que permite a tu procesador ver y usar toda la memoria de tu tarjeta gráfica de una sentada, sin trocearla en ventanitas pequeñas. En la práctica eso puede traducirse en unos FPS extra y menos cuellos de botella, aunque su impacto varía bastante según el título.
El matiz clave, y justo el tema de este artículo, es que todo esto se habilita en el firmware del equipo. Sí, toca meterse en el menú del sistema y activar cosas en el UEFI (lo que muchos seguimos llamando BIOS por costumbre). Y además hay un segundo mundo apasionante: mods que permiten activar Resizable BAR en plataformas antiguas que en teoría no lo soportan, con nombres que ya te sonarán como ReBarUEFI o NVStrapsReBar.
Qué es Resizable BAR (SAM) y por qué importa
Resizable BAR son las siglas de Resizable Base Address Register. Dicho sin jerga, habilita que la CPU acceda a toda la VRAM de la GPU de una vez. Antes, el acceso se hacía en bloques de 256 MB, lo que obligaba al sistema a ir gestionando esos fragmentos para mover texturas y datos pesados.
Algunos fabricantes explican esta limitación de otra forma: se hablaba de un techo práctico de ~1 GB de memoria gráfica visible a la CPU de manera simultánea. Con Resizable BAR esa barrera se elimina, así que hay menos viajes de ida y vuelta entre CPU y GPU cuando un juego carga contenido grande.
Esta capacidad existe desde la era de PCI Express 2.0, pero se empezó a aprovechar de verdad hace relativamente poco, cuando AMD y NVIDIA comenzaron a activar perfiles y soporte en sus controladores y hardware modernos. Esa es la razón por la que verás resultados muy diferentes entre juegos: hay títulos en los que apenas se nota y otros en los que el salto es claro.
¿Cuánto se gana? Depende de cada caso. Se han visto escenarios con mejoras de entre el 5% y el 25% en determinados juegos; en otras combinaciones la subida media reportada ronda el 6%. No es magia, pero cuando vas justo de FPS o te interesa rascar fluidez, todo suma.
Compatibilidades oficiales y limitaciones por generaciones
En el lado de AMD, el impulso fuerte llegó con los Ryzen 5000 y las gráficas Radeon RX 6000. En generaciones anteriores no lo habilitaron oficialmente, a pesar de que la tecnología base existía. Por eso verás que muchas guías mencionan SAM (Smart Access Memory) en equipos relativamente recientes.
En Intel la foto es similar: oficialmente la compatibilidad llega a partir de las plataformas modernas, mientras que las CPU previas a 10ª gen (Comet Lake) se consideran fuera de soporte. Y en AMD, de forma análoga, se citan como no admitidas las anteriores a Ryzen 3000 (Zen 2) cuando hablamos de soporte directo y sencillo, sin mods.
En el ecosistema NVIDIA, la activación nativa y sin rodeos se plantea para las GeForce RTX 30 y superiores. Esto no significa que no se pueda hacer nada con tarjetas previas, pero requiere soluciones especiales que veremos más adelante y, sobre todo, tocar la configuración del firmware del sistema.
Un apunte importante: para que Resizable BAR funcione, tu equipo debe cumplir con un mínimo común denominador de compatibilidad entre GPU, CPU y placa base. Que uno de los tres componentes no acompañe puede dejarte sin la opción en el menú del UEFI o activarla sin resultados apreciables.
Activarlo desde el UEFI: opciones clave que suelen intervenir
El punto de partida siempre es el mismo: entrar al UEFI de la placa base y localizar las opciones relacionadas con Re-Size BAR Support y con la gestión de espacio de direcciones de 64 bits para dispositivos PCIe. En la mayoría de fabricantes verás también el ajuste llamado Above 4G Decoding (o variantes en español), que conviene tener habilitado para que todo cuadre.
Además de activar Re-Size BAR en el firmware, conviene revisar el modo de arranque del sistema. Muchos usuarios llegan con Windows instalado en modo Legacy (CSM) en lugar de UEFI nativo. Ahí es donde surgen las dudas: se cambia el apartado de Boot a UEFI en la BIOS, pero Windows sigue informando que no está en UEFI.
Un caso típico es el de quien usa una placa como la Aorus Pro AC B550: la BIOS ya está en UEFI, pero el sistema operativo se instaló en Legacy, y por eso SAM/Resizable BAR no aparece activo. No basta con un cambio en el menú de arranque; hace falta que el SO esté en un disco con particionado apropiado y que arranque en UEFI de verdad.
Esto no es un tutorial de migración, pero la idea general es clara: comprobar que el disco del sistema está preparado para arrancar en UEFI y que no dependemos del CSM. Una vez resuelto ese punto, habilitar Above 4G Decoding y Re-Size BAR en el UEFI suele ser cuestión de unos pocos clics, siempre que la combinación de hardware sea compatible.
Cuando lo oficial no llega: ReBarUEFI para plataformas antiguas
Aquí empieza lo entretenido. Aunque muchas plataformas antiguas no exponen soporte en el menú, la comunidad ha encontrado la forma de inyectar compatibilidad desde el propio firmware. Uno de los proyectos más conocidos es ReBarUEFI, obra de xCuri0 y publicado en GitHub.
¿Qué hace exactamente? ReBarUEFI añade y modifica piezas del entorno de ejecución del UEFI, el famoso DXE (Driver Execution Environment), que es la fase donde se inicializan la mayoría de controladores antes de arrancar el sistema operativo. Entre otras cosas, reemplaza el componente PreprocessController del PciHostBridgeResourceAllocationProtocol por una rutina que verifica la compatibilidad con Resizable BAR y habilita el redimensionamiento.
El tamaño de la ventana de ReBAR se establece agregando un módulo específico dentro del controlador DXE del firmware. Con estos cambios, el sistema cree y expone que la plataforma es compatible con Resizable BAR aunque, oficialmente, el fabricante no lo hubiese activado en esa generación.
Lo más llamativo es que se ha demostrado funcionamiento con Intel Sandy Bridge (2011) y con procesadores Ivy Bridge (3ª gen). Y en teoría, mientras la placa base implemente UEFI, el mod podría funcionar en más modelos. En el lado de AMD, hay menos información pública en estas pruebas concretas, y no siempre se garantiza el éxito.
En términos de rendimiento, algunos reportes sitúan la mejora media alrededor del 6% en juegos. No es un salto abismal, pero en equipos veteranos puede ser el empujón justo para estabilizar la experiencia. Eso sí, conviene no perder de vista los riesgos: estamos hablando de modificar el firmware de la placa base.
NVStrapsReBar: llevando ReBAR a GeForce RTX 20 y GTX 16
Otro nombre que vas a encontrar es NVStrapsReBar, un driver UEFI que persigue el mismo objetivo: habilitar Resizable BAR en combinaciones donde, de fábrica, no está disponible. Su interés es grande porque abre la puerta a las GeForce RTX 20 y las GTX 16, familias que en principio se quedaban fuera del soporte oficial de NVIDIA.
La clave práctica es que para usar NVStrapsReBar hay que flashear una imagen UEFI modificada en la placa base. ¿Por qué no se toca la vBIOS de la tarjeta gráfica? Porque en NVIDIA la vBIOS suele ir firmada y no se puede alterar sin invalidarla; en cambio, el firmware de la placa base, aunque también firmado, sí acostumbra a permitir modificaciones con menos trabas.
Como en el caso anterior, hay requisitos imprescindibles: entrar al UEFI y activar Above 4G Decoding antes de iniciar cualquier procedimiento, revisar compatibilidad con el hardware concreto y seguir paso a paso las indicaciones del repositorio en GitHub. En estas operaciones conviene ir con calma y tener claro qué se está cambiando.
La recompensa potencial es una mejora tangible en juegos en equipos con RTX 20 o GTX 16 que, de otro modo, no podrían beneficiarse de Resizable BAR. Dicho esto, los riesgos existen: tocar la BIOS entraña peligro, y nadie quiere quedarse con una placa inservible por un corte de luz o un paso en falso.
Rendimiento real: de los porcentajes a lo que notas en pantalla
Cuando se habla de un 5% a 25% de mejora en ciertos juegos o de un 6% de media con determinadas combinaciones, lo importante es ponerlo en contexto. En títulos con grandes conjuntos de texturas y streaming de datos agresivo, Resizable BAR puede limar microparones y aportar algunos FPS estables.
Si tu GPU ya va al 99% constantemente y la CPU no es el cuello, quizá notes menos. En cambio, en escenarios donde la comunicación CPU-GPU era la restricción, desbloquear el acceso a toda la VRAM ayuda. Aquí es donde entran en juego los perfiles que AMD y NVIDIA han preparado para varios títulos, activando o desactivando la característica según convenga.
Conviene también recordar que cada estudio optimiza a su manera, y no todos los motores sacan el mismo partido de Resizable BAR. Por eso verás que la eficacia depende del juego: en unos, te parecerá un cambio menor; en otros, te alegra la tarde.
Compatibilidad práctica: lo que suele marcar la diferencia
Más allá del marketing, la realidad del usuario pasa por tres filtros. Primero, la placa base: que tenga UEFI con opciones de Re-Size BAR y Above 4G Decoding visibles o, al menos, modificables. Segundo, la CPU: en generaciones antiguas sin soporte oficial, tocará recurrir a proyectos como ReBarUEFI.
Tercero, la GPU: en AMD, las Radeon modernas encajan bien con SAM; en NVIDIA, la cosa es directa a partir de la serie RTX 30, y para RTX 20/GTX 16 existen alternativas como NVStrapsReBar. La combinación de los tres factores es la que desbloquea, o no, la casilla en el UEFI.
Si estás en esa situación en la que «la BIOS dice UEFI» pero Windows te insiste en que no, estás ante una instalación del sistema en modo Legacy. A veces toca reinstalar o migrar el arranque al formato adecuado para que todo sume. No es lo más divertido del mundo, pero es el precio para que SAM/Resizable BAR funcione de forma limpia.
Riesgos, copias de seguridad y sentido común
Modificar el firmware de una placa base no es lo mismo que ajustar un par de sliders de overclock. Si algo sale mal puedes brickear la placa, y no siempre hay recuperación sin programador externo. Dicho de otra forma: no es un experimento para hacer con prisas ni sin red de seguridad.
Antes de plantearte cualquier cambio profundo, asegúrate de tener a mano una copia de la BIOS, entender el procedimiento de flasheo de tu modelo concreto y, si tu placa lo ofrece, activar mecanismos de protección (Dual BIOS, backups, etc.). La idea no es asustar, sino evitar disgustos innecesarios.
¿Merece la pena? Para algunos entusiastas, sí: disfrutar de la mejora y del reto técnico compensa. Para otros, con un equipo que ya rinde bien, el riesgo por «unos pocos FPS» no sale a cuenta. Hay redactores y usuarios que opinan abiertamente que no compensa el esfuerzo cuando la ganancia es modesta, y es una postura totalmente razonable.
Lo que cuentan las comunidades y la experiencia en la vida real
Muchos descubrimos Resizable BAR leyendo a compañeros y foros técnicos. En grupos de entusiastas como comunidades de Xeon y modders es habitual ver comentarios del tipo «rasco algunos FPS más» tras activar la función, con capturas de benchmarks antes y después.
También verás mensajes más mundanos: «Yo ni juego, ¿para qué me meto en esto?». Y es que no todo el mundo busca exprimir el hardware. Si te mueves por curiosidad técnica, ReBarUEFI y NVStrapsReBar son un terreno de juego estupendo; si solo quieres estabilidad, la configuración oficial puede ser suficiente.
Entre medios especializados es frecuente que, al hablar de estas mejoras, se recomiende revisar listas de placas base y procesadores actuales por si estás valorando actualizar plataforma. No es mala idea: a veces, por el coste y el tiempo que implica un mod, te compensa más dar el salto a hardware con soporte nativo.
Buenas prácticas si decides probar
Infórmate en la fuente del proyecto (ReBarUEFI o NVStrapsReBar) y lee la guía específica para tu chipset y modelo de placa. Hay diferencias sutiles entre fabricantes y revisiones que conviene conocer antes de tocar nada.
Confirma que tienes activado Above 4G Decoding y, si tu UEFI lo ofrece, la opción Re-Size BAR Support. Cuando el objetivo es usar un mod, revisa siempre los prerrequisitos que el autor documenta en su repositorio y no te saltes pasos.
Si tu tarjeta es NVIDIA y estás apuntando a RTX 20 o GTX 16, asume que la vBIOS está firmada y no se modifica; el camino pasa por el firmware de la placa base (de ahí que NVStrapsReBar pida flashear una imagen UEFI). No mezcles métodos de distintas guías y, por favor, anota los cambios para poder revertirlos si algo no sale como esperabas.
Lo interesante de Resizable BAR no es solo el incremento en FPS, sino cómo la comunidad ha conseguido que una función presente desde PCIe 2.0 se aproveche de verdad incluso en equipos más viejos. Entre la compatibilidad oficial de las últimas generaciones y los mods como ReBarUEFI o NVStrapsReBar, activar esta característica desde el UEFI es hoy una posibilidad real para muchos usuarios, con beneficios modestos pero apreciables y con el matiz ineludible del riesgo cuando hay que tocar la BIOS.
Redactor apasionado del mundo de los bytes y la tecnología en general. Me encanta compartir mis conocimientos a través de la escritura, y eso es lo que haré en este blog, mostrarte todo lo más interesante sobre gadgets, software, hardware, tendencias tecnológicas, y más. Mi objetivo es ayudarte a navegar por el mundo digital de forma sencilla y entretenida.