Estos son algunos consejos para lidiar con los jefes tóxicos

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Patrón tóxico

¿Tu jefe es poco profesional? ¿Estás dificultando las cosas en el trabajo? Es posible que tengas un jefe tóxico. En este artículo hablaremos de los jefes tóxicos y de las formas profesionales de enfrentarse a ellos.

Aunque pienses que los jefes tóxicos son raros, son más comunes de lo que crees. Antes de hablar de las señales de advertencia que debes tener en cuenta, hablemos primero de lo que son.

Hay más patrones tóxicos de los que crees.

Una cosa es lidiar con colegas tóxicos, pero puede ser muy difícil cuando se trata de jefes tóxicos. Es decepcionante saberlo, pero puede haber más jefes tóxicos que buenos jefes, según estos Emtrain tiene estadísticas sobre la cultura del lugar de trabajo:

  • Uno de cada tres empleados considera que sus jefes dan un sentido de pertenencia a toda la empresa.
  • el 44% de los empleados no está seguro de que Recursos Humanos investigue una queja.
  • Sólo el 33% de los empleados se sienten cómodos diciendo «No» a las peticiones poco razonables de su jefe.

Son cifras muy serias. Los empleados que trabajan en lugares de trabajo estresantes tienen muchos problemas de salud. También hay Los investigadores han encontrado Trabajar en entornos tóxicos puede provocar un aumento de la depresión o del abuso de sustancias.

Cuando tratas con un jefe tóxico, no sólo está en juego tu sustento. También puedes poner en peligro tu salud, e incluso tu casa. A continuación hablaremos de las principales señales tóxicas que pueden causar problemas a tu jefe.

Estas son 6 señales de que puedes tener un jefe tóxico

El primer paso para navegar por un entorno de trabajo tóxico es saber qué está pasando. Demasiados jefes tóxicos se quedan porque son taimados y tienen formas injustas de salirse con la suya. Hay que evitar estos signos sutiles de un jefe tóxico

1. Un jefe sin escrúpulos quiere dirigirlo todo

Una de las señales más tóxicas para un jefe es la microgestión. Fíjate en lo que hace tu jefe después de asignar una tarea: ¿te deja trabajar solo? ¿O es que siempre quieren controlarlo todo y se niegan a escuchar las opiniones de los demás?

2. Utilizan su poder para evitar la responsabilidad

Si tu jefe se apresura a culparte a ti o a otros en lugar de encontrar una solución al problema, es una señal reveladora de que estás tratando con un jefe tóxico.

Este tipo de directivo arrojaría a cualquier empleado bajo el autobús para eludir su responsabilidad. Y lo más probable es que también se lleven el mérito de tu trabajo si lo haces bien.

3. No se preocupan por el bienestar de sus empleados

Los peores jefes tóxicos son los que no se preocupan por sus empleados. Estos son los directivos que no saben en qué estás trabajando. No te proporcionan los recursos que necesitas para hacer tu trabajo.

Son ellos los que constantemente dan de baja a sus empleados para mantener los costes bajos. Podrías ganar bonificaciones, o viceversa.

4. Las expectativas poco realistas son un signo de un jefe tóxico

Los directivos tóxicos son conocidos por establecer expectativas poco realistas. Estos directivos son conocidos por establecer expectativas poco realistas y por ignorar tus necesidades personales o de descanso. Se espera que estés disponible para trabajar horas extras o en días libres.

5. Son situaciones imprevisibles

Una señal de un jefe tóxico es cuando sientes que caminas sobre cáscaras de huevo en el trabajo. Usar jefes tóxicos Controlar el miedo. A menudo son amistosos un minuto y al siguiente amenazan tu posición en la empresa.

6. Hay favoritismo y acoso en el trabajo

Probablemente hayas visto cómo se desarrolla este escenario. Un directivo tiene favoritos: los favoritos tienen acceso a recursos que no están disponibles para todos los empleados.

Cuando un jefe tóxico tiene favoritos, lo más probable es que también sea un matón. Y cuando intimidan a sus empleados, no hay responsabilidad porque sus favoritos les cubren.

Siete puntos clave para lidiar con un jefe tóxico

La investigación ha demostrado repetidamente que los empleados abandonan las empresas, no sus directivos. Pruebas recientes demuestran que Empresarios: 57% Dejaron su trabajo por culpa del director.

Pero por cada persona que abandona, hay otra que tiene que quedarse porque no tiene otra opción. ¿Qué puedes hacer si te enfrentas a jefes tóxicos?

1. Puedes decidir dejarlo o quedarte.

La decisión de renunciar o quedarse afectará a tus planes y estrategias para lidiar con los jefes tóxicos. A veces no te das cuenta enseguida de que estás preparado para seguir adelante y eso también está bien. Debes tener una estrategia establecida.

Si estás preparado para dejarlo, tienes que tomar las riendas de tu vida y de tu carrera. No puedes dejarlo todo al azar. Ya sabes que tu jefe tóxico no tendrá en cuenta tus intereses. Aunque tu jefe te diga que prefiere que te quedes.

Decide cuáles son tus objetivos para el futuro. Puedes hablar de ello con tu mentor, un amigo de confianza u otro profesional. También puedes contratar a un preparador profesional si es necesario. Ultima un plan para tu partida.

2. Hacer amigos en el trabajo

Si tu jefe no es un buen líder, lo más probable es que tus compañeros también lo sepan. No participes en cotilleos que pueden volverse en tu contra.

Pero eso no significa que no puedas tener amigos en el trabajo. A lo sumo pueden hacer que tu día sea más llevadero. Además, tendrás a gente de tu lado que entiende por lo que estás pasando.

3. Aunque no le gustes a tu jefe, sé profesional

Puedes ser profesional aunque tu jefe parezca tóxico. Sé siempre cortés y honesto.

No dejes que su comportamiento y acciones negativas afecten a tu forma de hacer el trabajo. Tu profesionalidad puede ser percibida por los demás aunque tengas un liderazgo pobre.

Los jefes que utilizan la intimidación para mostrar su poder sólo quieren ser vistos como poderosos. Que piensen que van a ganar. No dejes que te hagan enfadar.

4. No seas un objetivo (haz tu trabajo y hazlo bien)

Encuentra formas de enfrentarte a los jefes tóxicos si tienes que seguir en tu trabajo. Habla con alguien de confianza en quien puedas confiar: un amigo, un familiar o un terapeuta.

Se pueden practicar aficiones como correr, pintar u otras actividades creativas. Puedes encontrar una afición que te permita expresar tu ira.

Cuando te presentes a trabajar, podrás hacer bien tu trabajo. Será menos probable que tu jefe te reprenda si eres capaz de producir buenos resultados.

5. Puedes aprender de su estilo de liderazgo y ser flexible.

Que tengas un jefe tóxico no significa que no puedas tener un crecimiento profesional. Para ayudarte a superar cada día, establece pequeños objetivos.

Mientras decides si te quedas o te vas, evalúa cómo encaja tu papel en esta empresa con la carrera que tienes en mente.

¿Cómo te ves evolucionando en tu trabajo actual? ¿Cuáles son tus objetivos? Éstas son las preguntas que debes hacerte para saber qué es lo que mejor se adapta a tu situación.

6. No te lo tomes como algo personal

Tu jefe tóxico es un reflejo de tu carácter. No es por ti ni por nada que hayas hecho.

Así que no te tomes las cosas como algo personal, aunque sean hirientes. Es probable que tu jefe se comporte exactamente igual contigo y con cualquier otra persona de tu posición.

7. Si es necesario, habla con Recursos Humanos y mantén un registro detallado

Recursos Humanos puede ayudarte si tu historial es sólido. Pero haz tu propio juicio al respecto: tú conoces la cultura y la gestión de tu empresa mejor que nadie.

Aunque queremos que los empleados sean libres de protestar contra el trato injusto de sus jefes, también es malo para ellos.

Asegúrate de tener registros detallados y precisos si acudes a RRHH. Denuncia el comportamiento abusivo o inapropiado de tu jefe tóxico de la forma más clara y concreta posible.

No exageres nada y evita las referencias vagas, las historias sin fundamento o las opiniones.

Cuando trates con jefes tóxicos, mantén la calma

Es difícil trabajar en un entorno estresante El estrés puede causar una serie de problemas de salud Puede tener un impacto negativo en toda tu vida. Así que si estás tratando con un jefe tóxico, tómate el tiempo necesario para pensar realmente en tus opciones.

Puedes utilizar estos consejos para mantener tu trabajo productivo y positivo si decides quedarte. No dejes que un jefe tóxico ponga en peligro un trabajo que te gusta.

El siguiente paso es decidir dar los pasos necesarios para avanzar. Tienes que saber a dónde vas después. Pide a algunas personas -familiares, amigos o un entrenador profesional- que te ayuden.

En primer lugar, asegúrate de que estás preparado económicamente para tu transición profesional. Acumula tu fondo de emergencia, por si no puedes empezar inmediatamente con un nuevo trabajo. Todavía puedes encontrar un gran trabajo si tratas a los demás con respeto y te pagan bien.

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